lunes, 31 de mayo de 2010

¡Vomitalo!




¿Que mira?... ¿acaso usted nunca ha vomitado una palpitante y arteriosa masa roja? ¿nunca ha tenido esa sensación en la garganta que impide contener la brutal salida de un sanguinolento y carmín sentimiento? pues bien, no es una sensación grata, ni una experiencia que recomiende practicar: sentir la nausea viva en el pecho, la contracción del cuerpo y la ausencia de razón, solo el expulsión de una bola tibia, que late mientras es regurgitada. En tus manos o en el suelo, no expresa nada, no llora como un recién nacido, ni devela una secreta y sabia revelación; solo late en rítmicas y sosas contracciones, tirando chorros de sangre y haciendo tum tum, tum tum, tum tum...