martes, 8 de febrero de 2011

Recuerdo

Recuerdo...
Tardes enteras de juegos y excursiones, de inventos y correrías;
una calle de nombre Victoria y el imponente Hospital Paula Jara Quemada, en un rincón de Santiago donde el tiempo parecía estar detenido;
Mi auto de latón azul a pedales, el gran árbol en el centro del pasaje: 
¡Un dos tres por mí y por todos mis compañeros!; un oso de lana con un nombre bordado en la guata y el clásico chanchito de plástico
Recuerdo...
Los paseos con mi abuelo al Barrio Franklin; el olor a cuero, verduras y animales muertos; los rieles de un extinto Troley bus, adoquines en las calles y a mi primo cantando Los Prisioneros a todo pulmón
Cumpleaños con cuadra completa invitada, paseos de la mano de la vecina que pasaba, un solo teléfono en  todo el pasaje:¡ Sra Adriaana Teléfonoooo! y en el patio una triste batea de madera. 
Recuerdo...
Como quedó nuestra casa después del terremoto; el día en que no llegaste a la salida del colegio y la noticia de que Irene ya había partido… 
Recuerdo...
Que ese fue el lugar donde más felices fuimos...